Este viernes quedará habilitada la muestra de los tres artistas mendocinos con un acto que comenzará a las 20.

El próximo viernes 3 de octubre quedará inaugurada la muestra Silencio compartido, de los artistas Ángel Gil, Rebeca Sarelli y Antonio Sarelli. Se podrá disfrutar en el Museo Provincial de Bellas Artes Emiliano Guiñazú-Casa de Fader –San Martín 3651, Mayor Drummond, Luján de Cuyo– y el acto de apertura será a las 20. La entrada es gratuita y la muestra se podrá visitar hasta el 14 de diciembre.

Antonio Sarelli es uno de los grandes referentes de la plástica de Argentina. Estudió en la Academia Provincial de Bellas Artes, obtuvo diversos reconocimientos a lo largo de su carrera y sus obras pueden encontrarse en museos y colecciones privadas desde Mendoza, su tierra natal, hasta Barcelona, España. Su enorme talento y dedicación –durante décadas trabajó de día y pintó sin cesar por las noches– lo distinguen como uno de los referentes de la pintura contemporánea local y del país.

Rebeca Sarelli es una escultora con todas sus marcas propias. Solo le debe a su padre el apellido ligado a la cultura, pero todo lo demás lo ha conseguido con la fuerza de su talento.

En tanto, Ángel Gil nació en Godoy Cruz en 1937 y murió en Mendoza el 2 de septiembre de 2017. Egresó de la Academia Provincial de Bellas Artes de Mendoza en 1967. Ejerció la docencia en la misma escuela. Integró el Grupo Numen y junto a Sarelli, Ceverino, Scacco y Caner, formó el Grupo Alfa, y fue cofundador de las galerías Alfa, Numen y Zulema Zoireff. Obtuvo el Primer Premio en el Salón Nacional de Mendoza en 1967, Medalla de Oro en el Salón Bienal Municipal de Mendoza en 1971, el Tercer Premio en el Salón Bienal de Mendoza en 1972 y 1980 y el Primer Premio en 1994, y el Primer Premio Jorge Raúl Palero, en Mendoza en 2001.

“El silencio también nos estructura como sujetos y es tan singular como común a todos y cada uno de nosotros. Y es el arte el que lo explora y lo comparte. Rebeca dice que este tipo de silencio es el que compartieron más de una vez ella, su padre Antonio y su profesor y amigo Ángel”, dice Pablo Chiavazza en su texto curatorial acerca de la muestra.